FACH lidera histórica renovación de infraestructura en la Estación Polar Científica Conjunta Glaciar Unión
En pleno Círculo Polar Antártico, a 1.129 kilómetros del Polo Sur, la Estación Polar Científica Conjunta Glaciar Unión se encuentra plenamente operativa, marcando un nuevo hito para la presencia de Chile en el Continente Blanco. En el lugar está desplegada una dotación integrada por funcionarios del Ejército, la Armada, la Fuerza Aérea de Chile, el Instituto Antártico Chileno (INACH) y la Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC), quienes cumplen diversas tareas orientadas al apoyo de la investigación científica y la exploración en uno de los entornos más extremos del planeta.
Este año, la estación tiene una connotación especial para la FACH, ya que la Institución se encuentra a cargo de la instalación de cinco nuevos módulos de infraestructura, diseñados para mejorar significativamente las condiciones de habitabilidad, seguridad y operatividad del personal que trabaja en la zona, donde la temperatura promedio anual alcanza los -20 °C.
El Jefe de la División Antártica de la FACH, Comandante de Grupo (BA) Fernando Machuca, y parte del equipo que lidera el proyecto de infraestructura, explicó que la iniciativa fue presentada por la Institución y que en esta primera etapa corresponde a la Fuerza Aérea ejecutar la instalación de los módulos, consistentes en un baño, duchas y tres comedores que pueden operar de manera independiente o unirse entre sí. Las siguientes tres fases contemplan habilitar una cocina, enfermería, dormitorios y bodegas; estas etapas estarán a cargo del Estado Mayor Conjunto (EMCO), en su rol de organismo administrador de la Campaña Polar Científica Conjunta Glaciar Unión.
“La estación lleva más de diez años en el sector, pero las condiciones de habitabilidad, considerando las características meteorológicas extremas, ameritaban crecer y desarrollar mayores capacidades de resguardo y funcionamiento”, señaló el Comandante Machuca.
Actualmente, gran parte del asentamiento estival está compuesto por infraestructura armable, principalmente carpas, además de dos domos que deben ser desenterrados cada temporada para su utilización, labor que demanda un alto uso de maquinaria y un considerable esfuerzo físico. En este contexto, la llegada de los nuevos módulos representa un avance significativo.
Las estructuras cuentan con un sistema mecano de prearmado y están diseñadas específicamente para condiciones polares. Están construidas en acero galvanizado, material resistente a la corrosión y a las bajas temperaturas, lo que permitirá mejorar el aislamiento, la calefacción interior y el confort de sus ocupantes. Además, incorporan un sistema mixto de suministro eléctrico que puede operar mediante generadores tradicionales o a través de paneles fotovoltaicos, disminuyendo el uso de combustibles fósiles y respetando los Protocolos sobre Protección del Medio Ambiente en la Antártica.
Otro elemento innovador es que los módulos están instalados sobre esquíes, a una altura aproximada de 80 centímetros sobre la superficie, permitiendo que el viento evite la acumulación de nieve en su base. Esta característica facilitará que, en futuras campañas, la estación pueda ser habilitada de manera más rápida, evitando que las estructuras queden enterradas con el paso del tiempo.
“Este sistema permite que el viento reinante evite la acumulación de nieve. Igualmente, los esquíes hacen posible su traslado; si bien es acotado, ello permite que siempre permanezca sobre la altura normal de la superficie. De esta forma, se evita que queden enterrados bajo la nieve”, concluyó el Comandante Machuca.
La Estación Polar Científica Conjunta Glaciar Unión fue inaugurada el 4 de enero de 2014, reutilizando infraestructura proveniente de la antigua Estación Polar Teniente Arturo Parodi de la FACH. La implementación de estos nuevos módulos constituye la primera gran renovación oficial de sus espacios de habitabilidad, reflejando el compromiso permanente de la Fuerza Aérea de Chile con el desarrollo científico, la soberanía y la presencia activa del país en el territorio antártico.
Si bien las carpas continuarán siendo utilizadas como apoyo complementario, esta modernización marca un antes y un después en la evolución de la estación, fortaleciendo las capacidades logísticas y humanas de quienes, año tras año, enfrentan las duras condiciones del Continente Blanco en nombre de la ciencia y de Chile.

